sábado

Manifesto anti-droga, por Maria Amélia

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La droga la odio ¡Xa soltan a Oubiña, de tantas que fixo!
La droga la odio. La droga es horrible. Casas deshechas. Madres enfermas de ver a esos hijos acabados. ¡Por Dios!. Esto de la droga es horrible, horrible...
Ese señor hizo muchas. Vaya palacio que tiene, pero a cuenta de los españoles, esa desgracia que nos trajo. Él para vivir bien, puse a 20.000 familias mal. Me dicen muchas: "Pues que no la compren." Pero los niños pequeños se envician, porque le están dando, le están dando, y de ahí empieza todo. ¡Desalmados!.
Una vez en La Coruña veo a un niño, tan bien vestidito, era un domingo. Ese niño debía de venir de su casa, y veo que se mete en un portal y con un papelito veo que sorbe en la nariz. Y dije yo ¿y eso qué es?.
Y lo comenté, y me dijeron que eso era droga. Pues yo, en ese momento, si supiera que era droga de verdad, se la sacaba y se la rompía. Y le decía: "niño, vete para casa, que a tí te está manipulando esta gentuza. Y tu, cuatro perras que tienes, que hoy es domingo y te las darían."
Y fuí con tanta pena. El niño era precioso. Y una madre que tanto se sacrifica por sus hijiños y por su hogar, van estos animales y...
¡Qué no la compren!. ¡Hombre, por favor!. Si el niño no está formado cuando se la dáis.
Y viven tan tranquilos.